- Enfriar la quemadura inmediatamente, poniendo la zona afectada bajo un chorro de agua fría durante unos minutos.
- Secar con cuidado, sin forgra, y desinfectar con un gel antiséptico (de venta exclusiva en farmacias del tipo Betadine Gel)
- Tapar la quemadura para que la cura se efectúe en ambiente húmedo. Levantar el vendaje cada día y si no se observa mejoría acudir al centro médico.
- Es aconsejable que en pacientes de edad avanzada o niños pequeños este tipo de lesiones sean curadas por profesionales sanitarios. Tanto su piel, circulación e hidratación son diferentes y deben ser valorados individualmente.